miércoles, 7 de marzo de 2012

Ángel MITZRAEL

miércoles, 7 de mar de 2012
Descripción:
La energía que debemos utilizar el 7 de marzo se llama Mitzrael y lleva el número 60.
Vas a tener la posibilidad de sobresalir en el círculo de tus amistades habituales y para ello lo único que debes hacer es mantenerte fiel a tus principios y subordinarte a los que están a un nivel jerárquico superior al tuyo. 
Si lo haces así todo el mundo te verá más cerca del triunfo.
En cambio si tomas el camino de la insubordinación es fácil que empieces a tener problemas con los que antes te apreciaban y que ahora te achacan malas cualidades físicas y morales que te hacen vulnerable.
 
 Plegaria:
 
 MITZRAEL: Dios que consuela a los oprimidos. 
El Eterno es justo en todas sus vías y misericordioso en todas sus obras.
MITZRAEL: Limpia, Señor, los canales de mis cuerpos para que tus sublimes energías puedan transitar por ellos sin encontrar obstáculos.
Haz, Señor, que pueda vivir en mi nivel más elevado, creando a mi alrededor la divina armonía que de ti me llega.
Ayúdame a evitar que mi talento esté por encima de mi virtud, a fin de que en todo momento pueda servir de ejemplo.
Hazme fiel al mundo de arriba, a fin de que todos mis gestos, todas mis palabras, sean el fiel reflejo de la vida cósmica.

Lección 105

"Mías son la paz y la dicha de Dios"
La paz y la dicha de Dios nos pertenecen. Hoy las aceptamos sabiendo que son nuestras. Y que se multiplican a medida que los recibimos, al contrario que en los regalos del mundo, donde el que da parece perder lo que entrega. Uno de los objetivos del curso es invertir tu concepto del dar, de modo que puedas recibir. Acepta la dicha y la paz de Dios, y aprenderás a ver que los regalos no disminuyen cuando se dan, sino que se multiplican. La dicha de Dios aumenta cuando aceptas como tuya Su dicha y Su paz.- Dar verdaderamente equivale a crear. Añade a todo lo que ya está completo, no en el sentido de añadir algo (implicaría que antes era menos) sino que permite que Dios se complete a Si mismo, tal como Dios se define a sí mismo.
Sesiones largas: Comenzaremos ligeramente distinto hoy . Pensá en aquellos a quienes les negaste la paz y la dicha de acuerdo a las leyes de Dios, ya que al negárselas, te las negaste a vos mismo. Por eso, decile a cada uno, según cruce tu mente: "Hermano, te ofrezco la paz y la dicha, para que la dicha y la paz sean mías." Ahora estás listo para aceptar el regalo de paz y dicha que Dios te da. Ahora podés decir: "Mías son la paz y la dicha de Dios" porque diste lo que querés recibir. Cerrá los ojos, y dejá que Su Voz te asegure que estas palabras son verdad. Pasá hoy 5 minutos con Él de esta manera, pero no creas que menos tiempo no tiene valor. Asegurate de hacerlo cada hora. Proponete no interferir hoy en Sus designios.
Sesiones cortas: Si alguien parece tentarte a que le niegues este regalo, bendecilo lleno de agradecimiento y decile: "Hermano, te ofrezco la paz y la dicha, para que la dicha y la paz sean mías." Consideralo como una oportunidad más para aceptar los regalos de Dios como tuyos.